Marcial González

Marcial González fue uno que se ganaba la vida como podía. En sus últimos años hacía chapuzillas con su amigo Poli. Luego como Poli se lió con la chacha de un médico, el enchufismo hizo el resto.

Ocupó el puesto de celador del ambulatorio Bellasol. Siempre estaba planeando algún negocio ilegal y se distraia con mucha facilidad. Razón por la cual Nacho planeó un atentado contra su vida cortándole los cables de los frenos.

El caso es que la muerte fue más o menos provocada por Ednesto Ernesto, que no encontraba unos simples papeles en la guantera e hizo que Marcial se despistase de la carretera.

Tras caer por un acantilado, dar mil vueltas de campana y estrellarse en la única columna del lugar, quedó atrapado en su coche. Su agonía fue más larga que el cabreo de Rocío Jurado con Concha Piquer.

Estaban nosé cuantos bomberos y los de la UVI y no lo sacaron. Por allí estaba Nacho Martín y desaconsejó sacarlo. Evidentemente quería que muriese.

Tardó todo el día en morir. De aburrimiento. Al final todo el mundo estaba deseando que se muriese, incluso los paramédicos brindaron con champán. Ernesto murió semanas después, ya que no tenía quién le aliviarse los veves jueves.

A Marcial lo dejaron dentro del coche y lo enterraron junto con él.