Jaume Sisa

Miradme, soy
muy trangresor

Jaume Sisa es otro analfabeto digital, trasnochado, aspirante a parásito y nefasto cantautor catalán, conocido por su ingenua canción "Qualsevol nit pot sortir el sol" que se define a sí mismo como poeta galáctico y está englobado dentro de la Nova Cançó, etiqueta que agrupa a los cantautores afines al catalanismo rancio junto con Serrat y Llach. Ambos creyéndose dioses de la música cuando fueron apoyados por industrias discográficas por su perfil catalanista.
A este cantautor solo conocen cuatro catalanes y es un friki de cuidado que da el perfil de músico progre que en realidad es un capitalista convencido. 

Trayectoria

Dedicó su juventud a cantar y se saltaba las clases de matemáticas, ya que para él, Internet son solo cuatro personas, cuando más bien son cuatro mil millones. O eso, o los cuatro gatos se pasan todo el día en Internet.
En ese caso, habrá que buscarles un terapeuta para quitarles la adicción. Teniendo en cuenta que él es uno de ellos, habrá que investigar quien son los otros tres.

Quiso ser como Raimón, Francesc Pi de la Serra, Guillermina Motta, Joan Manuel Serrat, Maria del Mar Bonet o Lluís Llach, pero claro está, nunca le llegó ni a las suelas de los zapatos.
Llegó tarde, ya que luchar por la normalización del catalán había dejado de ser una arriesgada reivindicación y se convirtió en un medio fácil de conseguir subvenciones estatales. 

Etapa como Ricardo Solfa

No solo no era capaz de llenar ni media plaza de toros, es que ni tan siquiera una discoteca o verbena popular de pueblo. Motivo por el cual tuvo que inventar algo para seguir pudiendo ganarse la vida sin trabajar en algo que hiciera sudar. Entonces se olvidó del catalanismo y en vez de españolizar su nombre optó por medidas más drásticas: cambiarlo por completo a Ricardo Solfa, personaje con el que se retractaba de su catalanismo. El caso es que su aventura como Ricardo Solfa, no duro mucho porque, simplemente no gustó a nadie. 

Asalto al trono de la SGAE

Internet son cuatro tíos
que han montado su blog y
 se tiran toda la noche
haciendo clic, clic, clic

Acabó recluido una temporada en un monasterio benedictino y no sabía a qué dedicarse, ya que se ha estado viviendo a costa de subvenciones le era muy difícil dedicarse a un trabajo de verdad.

Lógicamente se fijó en Teddy Bautista y encontró en la defensa de otros creadores su particular forma de ganarse la vida. Su apellido (Sisa) le inspiró ganas de lo mismo y ya había visto que había un Caco Senante, así que luchó por meter mano en la caja registradora de la SGAE, que según le había dicho, estaba siempre abierta y ya se le estaba acabó la pasta que ganó en los 70 en subvenciones.

Maniobró para entrar en la directiva de la SGAE, donde llego a entrar en la junta directiva del 2007 al 2011, donde actuó de palmero de Teddy Bautista. 

Por suerte para él, no fue una de las cabezas que rodaron durante la Operación Saga y se planteó dirigir la SGAE con mano de hierro y asegurarse un pensionazo.