Alexei Kurkovski
Única foto que existe |
Es desconocido hoy en día debido a las malas condiciones de distribución que tuvieron sus obras. Su narrativa gráfica es magistral el cine instrospectivo e intimista de Kurkovski ha sido una de las mayores aportaciones al séptimo arte en el siglo XX.
Su mirada de la realidad nos hizo verla desde una nueva perspectiva, mucho más humana.
Biografía
Debutó tras las cámaras en 1962 en Rusia adonde se había mudado con su familia siendo un adolescente. Su primera obra ya apuntaba su carácter vanguardista y transgresor.
Kurkovski consistió en recuperar un género mal visto por las autoridades oficiales, y en convertir a Yuri Gagarin en versión femenina, casada con uno de los jefes del proyecto espacial que dirige la misión desde tierra.
Pero la mujer empieza a sentirse cautivada por la voz masculina del ordenador de a bordo. Kubrick sacó algunas ideas para su mítica 2001. Desafortunadamente, la película no gustó al público ruso y tampoco a los censores. Kurkosvki fue desde entonces censurado y su segunda película la hizo en la más absoluta clandestinidad.
Kurkovski plasmó las miserias que los prebostes de la Unión Soviética trataban de acallar. La historia gira en torno a un contrabandista que se enamora de Irina, una joven heroinómana. Todo en el filme es de una crudeza escatológica que por momentos se hace difícilmente soportable. Al descubrirle las autoridades emigró a Francia.
Su cine era demasiado incomprendido y lo intentó en Japón. Las autoridades soviéticas eliminaron todo documento sobre la existencia de Kurkovski y amenazaron a quienes conocían la historia para que no hablaran. Las fotografías en la que aparecía con Nikita Kruschev fueron retocadas, las películas borradas, los documentos destruidos... fue borrado de la memoria.
Años después un periodista norteamericano compró en una subasta un lote de películas polacas. Entre ellas había la única fotografía que se conserva del director polaco y copias originales que se salvaron de su destrucción.
Empezó a investigar y descubrió la terrible y dramática historia de Alexei Kurkovski, indecentemente borrado, olvidado, enterrado y traicionado por su propio país. Sus familiares fueron trasladados a un recinto de alta seguridad.
Nunca hubiéramos sabido nada más de ellos si, al cabo de treinta años, no hubiera aparecido las notas de una adolescente que decía ser hija de Alexei Kurkovski, en las que narra su cautiverio con una caligrafía cirílica casi microscópica.
Los médicos le diagnosticaron un cáncer terminal y decidió retirarse. Kurkovski se fue así de forma discreta, casi silenciosa. Su muerte en los atentados del 11 de septiembre de 2001 no ocupó en los periódicos más que unas pocas líneas. Pero nos queda al menos las películas que no se han perdido. Una experiencia que les hará decir sin complejos. "¿Kurkovski?... Un genio".
Su oligofrénica mirada sobre la condición del hombre contemporáneo es mucho más acerada y onírica que la perspectiva diarreico-atemporal de Tanarasi. Su obra más ecléctica fue "Dionisos en su Mesilla de Noche". La película no tuvo repercusión comercial en su día, podéis descárgala en directamente de su web no oficial, ya que está libre de derechos.
Él ya no está con nosotros, pero perdurará en el tiempo su mensaje: Recuerda, si quieres cambiar el mundo tienes que cambiarte primero a ti mismo; esta es la naturaleza de las cosas. La revolución empieza por uno mismo. Sólo así podrás irradiarla a los corazones de los demás.
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