Incidente de la mermelada en Sorpresa, sorpresa de 1999
A pesar de la baja audiencia de aquel programa por aquel entonces dio la vuelta en todo el país cuando en aquella época el Internet aun no estaba extendido.
Historia
Como en todas las entregas del formato presentado por Concha Velasco, una persona iba a ser sorprendida. En esta ocasión se trataba de una niña malagueña menor de edad, que iba a recibir la visita inesperada de su ídolo desde la infancia: Ricky Martin.
El cantante había llegado a su casa y, para que la sorpresa fuera más grande, se había escondido en el armario de su habitación esperando a que la chica apareciera.
En ese instante llega la protagonista, coge un bote de mermelada y se unta sus genitales con el contenido para después llamar a su perro y hacer que se lo limpiara con la lengua. Y justo en ese momento, Ricky Martin abre la puerta del armario, salió y se encontró con ese percal. Se volvió a meter y no volvió a salir hasta el 2010.
Consecuencias
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| La niña |
El sindicato que defiende los derechos del niño, Prodeni, se hizo eco y decidió demandar a Antena 3 por lo ocurrido.
Entonces comenzó la ocultación. Antena 3 alegó que la denuncia era falsa y que no entendían cóm los acusaban sin ninguna prueba aunque muchas personas lo hubieran visto.
Por aquella época Antena 3 pertenecía a Telefónica que era muy afin a José María Aznar y la campaña de ocultación fue muy rápida.
El programa era muy largo y no interesaba a nadie, así que evidentemente casi nadie grabó el programa y nunca se pudo demostrar nada. Los pocos que si lo hicieron, Antena 3 les compró la cinta por 6000 Euros.
En el programa original la escena se emite de una manera prácticamente íntegra. La escena se corta enseguida y la presentadora (Concha Velasco) sale del embrollo y enseguida cortaron para publicidad.
En la repetición del domingo por la mañana (que lógicamente causó gran expectación), la reposición y pase de prensa las partes donde aparecía esta historia fue editada a toda prisa en muy pocas horas.
El caso finalmente no llegó a ningún lado y nadie ha sido capaz de demostrar que ocurriera de verdad.
Posteriormente la Guardia Civil entregó una copia del video a un juez y al abogado de la familia.
La única copia del video fue guardada por su madre (fallecida en 2014), pero aseguró que nadie sabe dónde se encuentra actualmente.
Se especuló que si alguien aún mantenía el video en su poder, es probable que estuviera tan deteriorado por el paso del tiempo que sería imposible reproducirlo hoy en día.
La niña avergonzada fue maltratada en su colegio e incluso se había suicidado. Al perro lo sacrificaron.
Desde entonces Concha Velasco moja su Tena Lady y todavía tiene pérdidas cuando rememora el suceso. Como dato positivo, aumentaron las ventas de mermelada y adopciones de perros.
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