Quequé
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| No es gracioso... Solo te lo parece |
Siempre que interviene en algún programa se le nota una cierta pedantería que le hace caer mal. Tampoco ayuda que se pase todo el día haciendo política encubierta con chistes tan rancios como él.
Empezó como monologista, pero desde que participó en Noche Hache, vio que eso de ser bufón de la causa socialista era muy rentable. El formato llegó a ser tan lameculos del PSOE que los espectadores podían oler el culo de ZP en su boca desde casa.
Se quemó tanto el programa que lo cancelaron. Seguidamente le dieron a él el mando de Estas no son las noticias, que era lo mismo. No duró mucho.
A partir de ahí, llegó su ocaso. Desapareció del mapa, aunque nunca le faltó trabajo gracias a sus amiguetes que lo enchufan una y otra vez.
No hizo nada de interés hasta que llegó La Vida moderna en la radio para continuar su labor de palmero del gobierno en La Ser gracias a Ignatius Farray y Broncano.
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