Bicicleta

Una Bicicleta es un artilugio utilizado por los humanos para infligirse torturas físicas y mentales, bajo el pretexto absurdo de "hacer ejercicio" y "disfrutar del aire libre". 

Combina ruedas traicioneras, pedales demoníacos y un sillín diseñado para generar el máximo dolor en las partes más sensibles de la anatomía humana.

Este instrumento de autotortura obliga a las almas desdichadas a realizar un esfuerzo desmesurado para moverse de un lugar a otro, en lugar de utilizar métodos más sensatos y menos agotadores, como caminar, ir en coche o simplemente quedarse en casa. 

Se dice que proporciona una sensación de libertad, pero en realidad solo conduce a la fatiga, la sudoración excesiva y el inevitable colapso en el suelo, mientras los transeúntes observan con morbo y risas maliciosas.

También es motivo de preocupación. Sus ruedas delgadas y traicioneras parecen estar dispuestas a deslizarse en cualquier momento, llevando al incauto ciclista a un destino doloroso y lleno de huesos rotos. Los pedales, como si tuvieran vida propia, se resisten a ser accionados, haciendo que las piernas se quemen y los pulmones se desgarren en busca de un simple impulso hacia adelante. 

Y, por supuesto, el sillín, un instrumento de tortura ergonómica, diseñado específicamente para causar el máximo dolor y entumecimiento en la zona más delicada del ciclista.

Esta creación que engaña a los incautos con falsas promesas de salud y diversión. Aunque algunos la adoran como si fuera un objeto sagrado, es evidente que su verdadero propósito es atormentar a los humanos y hacerlos sufrir en nombre de la supuesta "actividad física".