Eugenia Martinez de Irujo
Eugenia Martinez de Irujo es una aristócrata, famosa por ser hija de Cayetana Fitz-James Stuart, a la que cada día se va pareciendo más.
Poca cosa útil ha hecho, aparte de sus novios, casarse disfrazada de Isabel La Católica, tener una hija y adoptar un burro.
Ha tratado de evitar su destino y transformarse en su madre, pero por más operaciones y estiramientos que se ha hecho, no lo ha conseguido.
Actualmente está momificada, apenas puede sonreír y cada vez se le ve la cara como más de plástico. Se casó con el presidente de Universal Music, el cual seguro que le da más mandanga a las triunfitas que a ella.
Antena 3 tuvo que pagar 90.000 euros por invadir su intimidad. Queda saber cuánto nos pedirá por este último párrafo. Otra cosa es lo que saque, ya que los editores de este blog son pobres y la otra mitad vive debajo de un puente
Biografía
Nació en un laboratorio. La crearon a partir del ADN de una piñata junto a sus hermanas gemelas Carmen Porter y Nira Juanco.
Ella se crió con la duquesa de Alba.
Sus primeros novios fueron cayetanos. Luis González Conde y luego Sergio Baigorri. Lego se hartó de pijos y buscó toreros como Fran Rivera Ordóñez y Miguel Baez "el Litri". Después volvió con Fran.
Tuvo tres hijos Cayetana Rivera y Martínez de Irujo. Bueno, o una con muchos nombres. Realmente poco importa. El matrimonio se declaró nulo y ella oficialmente no existe.
Entonces volvió a interesarse por cayetanos como Colate. Pero Colate volvía a casa oliendo a leña de otro hogar constantemente y duró poco.
Entonces se fijó en Gonzalo Miró, el gigoló de la época. Tenía pelo por aquel entonces.
En los años posteriores a la ruptura con Gonzalo, destacan sus idas y venidas con mañacos. Aunque los nombres que finalmente trascendieron fueron dos. Enrique López, un veinteañero emparentado con Inés Sastre, e Ignacio Ventosa, un treintañero catalán forrado que va de indie.
Luego se dejó de tonterías y tiró por la nobleza con Vcente Dalmáu.
Lo de José Coronado fue un expediente X.
En el año 2017, pasó por el altar junto a Narcís Rebollo.
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