Nathalie Seseña
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Tienendo una Derrama cerebral |
Se caracteriza por ese enorme buzón que tiene por boca que si quisiera podría tragarse a Jonás y a la ballena juntos. Es tan atractiva como Rosi De Palma chupando limón.
Tiene en mente que cree que es actriz para cine, pero como mucho vale solo para teatro, de donde nunca debió salir.
En la actualidad trabaja en la serie de televisión La que se avecina, pero no es más que una obra de teatro televisada. Se casó con el negro del whatsapp y tuvieron un hijo. Pero lo perdieron en un supermercado.
Biografía
Empezó en el teatro como Dios manda. Debutó en 1990 en la serie “Las chicas de hoy en día” a la que siguieron otras como “Celia” o “Farmacia de guardia”.
Desde entonces ha participado en un gran número de series interpretando siempre a una fea y tonta en apariciones episodicas. Su papel más importante en la tele fue de amiga tonta de Paz Padilla en “¡Ala… Dina!. Tambien aparece en Demoda, una serie que nadie sabe de que iba, por que nadie la vio y hasta ahora pocos sabían de su existencia.
En cuanto al cine, empezó en 1990 con la película “Alegre ma non troppo” cuyo argumento no tiene ni pies ni cabeza. Un músico gay que acaba de romper con su novio y quiere entrar en la Joven Orquesta Nacional.
En 1994 trabajó en “Dile a Laura que la quiero” y “Palace”. Al año siguiente en El día de la bestia, de Álex de la Iglesia, y La Duquesa Roja.
En 1996 trabajó en “Dame algo” y “La Celestina”. Otros títulos durante esta época fueron “Airbag”, una película tan abominable, odiosa y patética que hasta duele en la que enseña las perolas. También "Agujetas en el alma” o "Atómica" uno de los mayores engendros del cine español de los últimos tiempos.
A partir del 2000 ha seguido trabajando en diferentes películas, como “Carne de gallina”, La comedia de serie Z "El chocolate del loro” o la película de Paco Mir “Lo mejor que le puede pasar a un cruasán”, cuyo visionado hará que cojas manía a los cruasanes.
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