Arturo Requejo

Ey... ¿Cómo va eso?
Arturo Requejo
es un gigoló que se hizo conocido en el mundo de la farándula por participar en Gran Hermano 11.

Es  allí hizo un despliegue de sus habilidades de edredoning, lo que le valió el sobrenombre de Arturo Pito Duro. Así mismo se le conoce como El Delfín por una broma en el jacuzzi en una de sus habituales erecciones. 

En GH11 e lio con Indhira, y todo iba bien en la cama durante una semana. Pero todo cambió cuando llegó Carol, la vasca, y Arturo perdió el culo por ella y a Indhira se le subieron los celos a la cabeza y le tiró un vaso de agua a Carol. Indhira fue expulsada y Tatiana, la rusa, decidió celebrar la llegada del Año Nuevo "descorchando" el champán del vasco, lo cual no gustó a la audiencia y lo expulsaron. 

Por desgracia aquí no acabó la cosa. Indhira y Arturo se pasearon de plató en plató de Telecinco. Luego pasó a participar en Gran Hermano, el reencuentro con Indhira, con la que tuvo edrenoning de nuevo. Esta vez fue Arturo quien emulando a la malagueña arrojó un vaso de vino&zumo-multifrutas, salpicando el plato de pasta que degustaba su compañera. Tras proferir insultos nunca antes oídos en GH (es un programa que se caracteriza por la educación de todos sus participantes), la organización no pudo más que expulsarle (que esto sirviera para crear polémica y rellenar la parrilla de Telecinco, y potenciar el intereses sobre el programa, es mera casualidad).

Tras el abandono por gordo ataque de gota de Paquirrín y de Tamara Gorro, lo llamaron para que Tatiana Delgado se desfogase en Supervivientes. Lo tiraron del helicóptero, pero le tiraron tan lejos de la playa que se veía al otro lado Cádiz. Y eso unido a que nadaba igual que un bloque de cemento, hizo que tardara en llegar a la isla unas tropecientas horas. Tuvo que ser Tony Genil quien lo fuera a buscar. 

Desde que llegó, el objetivo de los guionistas del programa no era otro que conseguir que se calzara a Tatiana Delgado. Incluso idearon una prueba de recompensa absurda para ponérselo más fácil y le dieron un nidito de amor en una islita, con alcohol y preservativos, para que fuera aun más evidente cual era la trama que pretendían vender. Intentaron hacer creer que Arturo y Tatiana habían estado bombeando cual máquina extractora de petróleo, pero no. Usaron el audio de un reto que les pusieron (comerse un pollo) en el que Tatiana gemía cual Santa Teresa en éxtasis y pusieron unas imágenes de la playa con cámara nocturna. 
Lo que pasó realmente es que después de ponerse más caliente que el palo de un churrero, Arturo tuvo finalmente que dormir boca abajo. 

Tatiana se puso digna y dijo que no a Arturo porque ella se respeta y respeta a su madre. Así de sutil y contradictoria puede ser la vida. Después de esto, la cuajada Danone que se le acumula, le dio muy mala leche. Finalmente fue expulsado de la isla sin catar nada. 

Nada más abandonar el concurso, actuando como un despechado y mal perdedor, no dudó en denominar a Rosa Benito perra vieja y referirse a su compañero Jeyko en femenino, quedando así como un troglodita homófobo.

En 2014 probó suerte saltando desde el trampolín de ¡Mira Quién Salta!, quedando tercer finalista en la edición. Allí no pasó nada sexual, ya que estaba por aquel entonces con la cantante Merche y dominó al delfín que llevaba dentro de los pantalones.
Juntos formaron una familia con su hija Ambika y vivían en el campo y se dedicaba a hacer yoga y a comer pepinos.

Pero el delfín salió de su reclusión y le puso los cuernos a Merche con Alexia Rivas.

 

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