Parábola de la Loncha de quezo

Levántate y hazme
Un sándwich

La metáfora de La loncha de quezo es una desconocida parábola de Jesús de Nazaret que recoge el nuevo testamento.
Sale en El evangelio de Marcos. Concretamente en el reverso de la página en la que Jesús predica en la sinagoga de Cafarnaún y antes de la curación de la suegra de Pedro.

Estuvo un tiempo en que se creía perdido para siempre pero realmente siempre estuvo. La cosa es que se pegó la página con la siguiente, ya que Marcos cuando la redactó le entró hambre y se fue a hacer un sándwich. Y claro, le echó mantequilla y el pringe de las manos hizo de pegamento. Por ello tanto Mateo como Lucas la omiten. Juan directamente se inventa un cuento.

Texto bíblico

A mi no me respondas mal
O te doy otra hostia

"En aquellos tiempos estaba Jesús, en Galilea garabateando algo en el suelo. Ponía algo así como Fariseo ite domun. Al acercarse una turba de gente lo borró.

Realmente estaba compuesta de familiares y vecinos. No es que le tranquilizara mucho más aquello.
El caso es que su madre le preguntó por lo que quería merendar. Él le respondió: En verdad os digo, que aquel que haga la voluntad de mi padre será mi hermano. Su madre le dio una hostia (sin consagración) en una mejilla y otra cuando puso la izquierda.

Pero Jesús respondió con una parábola:

Papiro 503

"Verdaderamente somos como una loncha de queso en un sandwich preso.
Tanto seas un samaritano como fariseo te sientes sin sosiego. Entre duda y el miedo.Y gritas no puedo. No te rindas si quieres ganar. Si lo haces vas a fracasar. En esta vida toca luchar Por lo que quieres alcanzar. 

Si ves imposible conseguirlo Reza a Dios con confianza. Entonces deberás admitirlo Nunca se debe perder la esperanza. Como una loncha de queso en un sandwich preso Te sientes insosiego. Entre duda y el miedo. Y gritas no puedo. No te rindas si quieres ganar Si lo haces vas a fracasar. En esta vida toca luchar Por lo que quieres alcanzar. Porque tienes dos manos y una cabeza sobre los hombros para dar fruto sanos y no quedarte entre escombros. 

Hazle una buena ha Esequia y si del quieres ya ser. Entonces reza confiesa Y Dios ejercerá su poder. Haz una buena Esequia y decide que quieres ya ser Entonces reza confiesa Y Dios ejercerá su poder".

Jesús por lo que se ve, había convertido demasiada agua en vino aquel día.
Su madre, que ya lo conocía, se habia ido a la mitad de la parábola.
Entonces le pidió el sándwich a la suegra de Pedro, pero ésta estaba enferma.
Así que la curó para que le hiciera el sándwich. También la puso a fregar y planchar la ropa.

Al día siguiente murió la suegra de Pedro por agotamiento y Jesus fue ingresado en alcohólicos anónimos durante 40 días y 40 noches. Aunque al tercer día escapó. Pero también es cierto que poco después lo volvieron a ingresar porque estaba dando patadas a una higuera que no le daba brevas.

Explicación

Aunque parezca un galimatías sin sentido, lo dijo Jesús, así que a callar.
En esta parábola tú eres el quezo, porque el quezo es bueno por naturaleza porque no pica, ni critica. Bueno, eso era antes de que Mercadona inventara el queso picante.

Entre "la duda y el miedo, que son la rebanada de arriba y la de abajo", respectivamente, del emparedado.
El sándwich es la vida, nuestros miedos.
Y "quezo" en lugar de queso porque su madre era muy robusta y cuando le dio las hostias le tiró tres dientes. Amén.