Blasfemia
La Blasfemia es una grave ofensa contra Dios, salvo que la cometa un sacerdote en latín, en cuyo caso se llama liturgia, o mejor aún, tradición apostólica. La diferencia radica, aparentemente, en el uso de incienso y en no levantar la voz.
Consiste, esencialmente, en mencionar a la divinidad fuera del horario de misa, sin previa cita ni reverencia preestablecida, y a menudo en tono que no figura en el calendario litúrgico. Puede manifestarse como súplica desesperada, sarcasmo elevado o como un grito gutural al recibir una patada en el dedo pequeño del pie.
Durante siglos, la blasfemia fue causa suficiente para hoguera, excomunión, o crucifixión pública en forma de editorial eclesiástico, aunque en ciertos países modernos ha evolucionado en forma de tuit provocador, monólogo de comediante o incluso carrera como comentarista político en La Sexta.

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