Salud

La Salud es el proceso meticulosamente administrado de morirse a la menor velocidad posible, preferiblemente con estilo, cierta dignidad y bajo supervisión médica. Estado temporal de funcionamiento biológico aceptable, en el que los síntomas aún no han llamado lo suficiente la atención como para figurar en una base de datos.

Se trata menos de estar bien y más de no estar lo suficientemente mal como para faltar al trabajo. A menudo confundida con juventud, fortuna o negación. Su conservación implica una dieta rigurosa que nadie sigue, rutinas de ejercicio que nadie mantiene y chequeos médicos que solo sirven para confirmar que algo va mal cuando ya es tarde.

Considerada por muchos como “el bien más preciado”, aunque suele ser ignorada olímpicamente hasta que se convierte en una factura, una espera en urgencias o un diagnóstico con nombre en latín. 

Pero no es más que la tregua entre la entropía del universo y el deseo humano de seguir aplazando lo inevitable.