Jessica Fletcher

Jessica Beatrice Fletcher más conocida como Jessica Fletcher o también conocida como Shiva La Destructora, Deathly Granny o Eterna Hacedora de Llantos. O simplemente como la vieja fea de los cojones que salía en la tele.

Era una profesora de inglés, una repipi, repelente y maquiavélica asesina en serie más refinada que Hannibal Lecter.

La estela de muerte y horror que deja Jessica Fletcher a su paso hace que Gengis Khan y sus tropas parezcan las Hermanitas de la Caridad.
Que no os confunda su mirada bondadosa, su sonrisa bonachona y sus muecas de sorpresa cuando halla un cadáver. Es el diablo, Belcebú, Lucifer, Luzbel. El Anticristo. Es una psicópata. Solo así se entiende que siga asistiendo a bodas, banquetes y bautizos sabiendo que se van a cargar a alguien allí y le dé absolutamente igual.

Biografía.

Nació vieja y arrugada. Tenía varias enfermedades del envejecimiento al nacer y, por lo tanto, con pocas posibilidades de supervivencia.
Sin embargo sobrevive y pensaron que al ser vieja con el tiempo rejuveneceria. Pero no, se hizo más vieja aun.

Abandonada por su padre biológico, después de que la madre muriera en el parto del susto, fue criado por una cabra que se alimentaba exclusivamente de latas de fabada Litoral.

Empezó a estudiar periodismo para poder abandonar la casa de su madre adoptiva, ya que cuando traia amigos a su casa le decían que olía a cabra.

No le fue muy bien y acabó de profesora. Se casó con un tal Capitán Fletcher y enviuda tiempo después. Se dice que de enfermedad, pero si sigue usted leyendo verá que debió hacerse una autopsia.

Seleccionando
Víctimas

Etapa asesina

Tras el fallecimiento de su esposo, se puso a escribir libros y a matar gente a mansalva. Vivía en Cabot Cove. Sin embargo, también realiza frecuentes viajes por toda la geografía Estados Unidos, para seguir matando.

Se hizo muy famosa como escritora. Nada extraño, ya que ella solo plasmaba lo que ella iba haciendo. El caso es que a nadie le extrañaba que donde quiera que ella estaba "casualmente" se acaba cometiendo un asesinato.

Con sus secuaces

A partir de ahí, ella se dedica a investigarlo, por lo que se podría decir que ella se lo guisaba y ella se lo comía. Normalmente las autoridades locales no sospechan de la sanguinaria viejecita.

Al final, Jessica siempre acaba manipulando las pruebas y cargándole el muerto al primer gilipollas que podía. Enredaba hasta confundir a la poli. Aunque hay quien afirma que el Sheriff Tupper y al Dr. Hazlitt son sus cómplices. El médico falseaba las autopsias y el sheriff plantaba pruebas falsas que corroboraran sus absurdas teorías.

Ja ja... Se lo han
Tragado

Seguramente éstos actuaban por miedo o chantajeados o porque le querian meter el pizarrín. Así dejó un reguero de tropecientos muertos a lo largo de doce años. En todos los capítulos al final al propio autor del crimen acaba confesando su culpa ante tanta evidencia.

Más de doscientos muertos en un pueblo de tres mil y pico personas hizo que la pila de cadaveres fue demasiado grande, una tasa de asesinatos superior a la de Detroit y a la de Honduras.

Vecino de Jessica

Ciudades que donde pides fuego para el cigarro y te vacían un cargador en el pecho. Jessica Fletcher se fue de Cabot Cove y va vivir en Nueva York.

Otra cosa que le motivo cambiar su base de operaciones es que Cabot Cove solo tenía 2000 habitantes y ya no quedaban ni para una partida de mus. Curiosamente a nadie le extrañó el alto índice de asesinatos. Aunque algo se olían y los vecinos cambian de calle al verla y no la invitaban a ninguna fiesta, ya que casa que visitaba era sinónimo de muerte.

En una carta presuntamente suya confesó el asesinato de 264 víctimas, pero el asunto se tapó. Ciertamente no tenemos pruebas pero hay verdades universales que no requieren pruebas científicas, y la oscuridad del alma de Jessica Fletcher es una de ellas.