Ana Guerra

Ve a OT. Triunfarás, decian

Ana Alicia Guerra Morales, más conocida como la tonta Ana Guerra, es otra triunfita canaria (por mucho que se avergüence de ello) engreida, creida y prepotente que fue popular en OT.

Su estilo musical es reggaetonero y olvidable. También toca el piano. Más bien lo palpa, ya que fue a clases de piano, pero se saltó la clase en la que enseñaban cómo abrir la tapa.
Aun así hace milagros con este instrumento. Es una auténtica virtuosa, capaz de hacerlo sonar hasta con la tapa bajada.
Solo le falta cantar bien y hacer buena música. 

Se avergüenza de su acento canario y que en lugar de tener acento canario le gustaría hablar castellano. Muy buena estrategia para conseguir bolos en tu tierra y hacer la competencia a Pepe Benavente.

Biografía

Empezó en la tele en Menudas estrellas, cuando lo presentaba el amante del azúcar glas Alonso Caparrós. Lego en el Veo veo de la sexymbol Teresa Rabal.

Entró en OT en 2017, donde fue la concursante más sobrevalorada de la edición y debería haber sido expulsada en las primeras semanas de concurso. Solo sobrevivió gracias al meme de Ana War.

Lo del libro es algo más triste. Con una sonrisa fue presentado en Madrid y contó solo con 26 seguidores en la cola. Casi había más periodistas, 14, que personas que quisieran el libro firmado. Y claro, se anularon las firmas por toda la geografía española, dejando a miles de millones de personas sin la posibilidad de no comprárselo.

Tras su salida de OT tuvo éxito con Lo malo y con Ni la hora parecía haber encontrado en los ritmos latinos y urbanos el camino sobre el que construir su trayectoria.
Unos singles que tienen un regusto demasiado comercial y prefabricado.

Después de eso fue de fracaso en fracaso, aunque quieran hacernos creer que está triunfando.
Solo ha sacado singles reggeatoneros de mierda de esos de usar y tirar. Y eso que en OT siempre decía que quería dedicarse a cantar boleros y a hacer musicales. En lugar de eso, no ha parado de sacar singles de reggaeton regulero.  Los cuales recogió como si un camión de la basura fuera, en un disco llamado Reflexión. Un disco verbenero atroz con una recopilación de canciones de  propias de una artista de 14 años recién salida de un talent show de Disney Channel sin nada rescatable.

Tiene 9 canciones donde sólo 3 son inéditas. El remix de Lo Malo, ese El Remedio empeorado y un acústico de Ni La Hora que en su octava semana en el mercado fue solo puesto 49 de la lista de ventas española y número 97 en la de streaming. De hecho, en poco tiempo después ya estaba completamente ausente tanto del top 100 de ventas como del top 100 de streaming.

Supuestamente iba a sacar boleros pero no estaba tan claro que pudiera colocar un disco boleros entre las canciones más escuchadas y los de la discográfica le dijeron que a lo mejor, para el siguiente disco.

En definitiva, habrá que esperar a un segundo álbum "más personal", o mejor producido, o ambas, porque de momento no es ésta la mejor carta de presentación

Lass cifras de Ana han sufrido un sangrado continuado de lanzamiento en lanzamiento y el interés por la cantante parece haber disminuido de forma más drástica que el de sus compañeros finalistas. Para colmo de males, sus trabajos parece ser los más discutidos en redes y por no hablar de sus continuadas meteduras de pata en redes y televisión.

A sus conciertos no iba ni el Tato. Casi se podía escuchar el eco.
En su primera gira en solitario (2019) se pudo comprobar que uno cosa son los clicks del YouTube y otra es la realidad. Y es que ella y su música no interesan mucho. solo ha vendió el 25 por ciento de las localidades. Y eso que solo se pusieron a la venta 1.200.

El precio de las entradas oscilaba entre los 25 y 60 euros. Evidentemente a sus fans, niños ratas no les llegaba con lo que sus papis les daba de paga.

En otros conciertos, se maquillaba la falta de aforo cambiando el emplazamiento del evento a un espacio más pequeño, acorde a las ventas.

En los siguientes conciertos tuvo que bajar el precio a 15 euros un precio único, por lo que tanto el público que estaba en la primera como en la última fila, pagaron la misma cantidad.

Luego pensaron que seria buena idea que se fuese de gira con Cepeda.
El resultado fue similar. Nisiquiera en su tierra natal consiguió ventas. Ni haciendo descuentos del 2x1 ni cambiando de fechas.
Teniendo en cuenta que Cepeda en solitario si tenía éxito, está claro que la culpa es de ella.
Como siguiente intento la pusieron con Tiziano Ferro.

Su carrera se estancó. Dejó a un costado su carrera de cantante e intenta sobrevivir llamando la atención en las redes sociales con vídeos y retratos. Luego se hizo la intensa, pero Malúses y Vanesasmartines ya hay a cascoporro.

 

Su fama pronto desaparecerá y su discografica le dará la carta de libertad patada. Entonces la veremos en uno de esos programas de famosos acabados encerrada en una casa o desterrada en una isla con el Paquirrín de turno. Si pretendía vivir de su novio Miguel Ángel Muñoz lo llevaba claro. Y de Víctor Elías, su novio posterior mucho menos.