Alessandro Lecquio

Me trincó a esa

Alessandro Vittorio Eugenio Conte Lecquio di Assaba y Torlonia es un noble italiano, Chulo playero, pichabrava y destacado gigoló conocido como el Conde Lecquio. Para horror de los españoles, está en la línea sucesoria real. Aunque por suerte, la familia real tienen herederos como conejos y solo un evento apocalíptico le llevaría al trono.

El título de conde Lecquio fue un regalo de Mussolini a su padre, diplomático adicto al régimen fascista. Su hermanastro mayor, Francesco, es el verdadero titular del título de la familia pero, se encargó de volverlo loco atándolo a una silla delante de una televisón cuya programación era la tele pública italiana y se encuentra internado en un manicomio.

Alessandro aprovechó para apoderarse del título para así poder tener mayor representación social. La sonada ruptura con la modelo Antonia Dell’Atte ocupó numerosas portadas de la prensa del corazón. Desde entonces, ha alimentado una fama de dandy conquistador, que le acompaña en todas sus intervenciones públicas. Cimentó su carrera en camas de hotel, cubiertas de yate y platós de televisión.

Pero comenzó a interesar cuando Ana Obregón, princesa sin corona de la prensa rosa, vio en él al aristocrático padre de su hijo. sus continuas apariciones en la prensa, con motivo de su relación con la actriz Ana Obregón, hicieron que Lecquio abandonara la empresa automovilística italiana y dedicarse de lleno a la farándula.

Le gustaba mucho el golf. Tanto que hizo más de un hoyo en unos con Silvia Tinao. Ana Obregón se enteró y lo puso en la calle. Pero lo cierto es que el conde intentaba volver con la Obregón y se lo suplicaba en cada llamada telefónica. Ana grabó estas conversaciones y se las envió a Silvia, que, indignada y dolida, rompió con él. Entonces empezó a salir con Sofía Mazagatos.

Desde entonces, como buen golfista, ha sabido en qué hoyo meter la bola para obtener el premio de la exclusiva.

A Sonia Moldes le puso los cuernos con Eugenia Martínez de Irujo e Ivonne Reyes. Aunque para ser justos, ella se trinca a a Mijatovic. 
Luego hizo hoyo en uno con Mar Flores. Fue tan espectacular que se hicieron unas fotos. Al naviero Fernández Tapias le empezaron a llamar El venao por las esquinas.
Por lo visto ella creía que así se celebraban las despedidas de soltera.

A Susana Molina le puso cuernos para aburrir.
Lo de Maribel Sanz parece más un montaje para sacar pasta que otra cosa.

Cuando la madurez rebajó el caché de sus ligues, volvió a buscar el cobijo de dos reinas: María Teresa Campos y Ana Rosa Quintana. Su papel de comentarista consorte es tan cantoso como los náuticos con calcetines.

Desde 2008 es marido de María Palacios Milla, a la cual le pone los cuernos con Silvia Fominaya, Miriam Sánchez, Nuria Bermúdez, Natacha Jaitt y tronistas, granhermanas varias y prostitutas.  Olvido Hormigos dijo en 2016 que había mantenido relaciones sexuales con él. Él lo negó y, junto a su mujer, le ganó en los tribunales le sacó 60.000 lereles.

Teniendo en cuenta que a las otras no las demandó debe ser que las anteriores son ciertas y su mujer lo sabe.