Paula Echevarría
Paula Echevarría, más conocida como La Bustamanta, es una sobrevaloradisima actriz y sobrevaloradisima modelo que por alguna razón la tienen encumbrada como Influencer, cuando quedó demostrado que copiaba los estilismos que sacaba en sus redes sociales.
Se muestra ante la prensa con una actitud entre condescendiente y altiva, sonrisas falsas, como si le diera asco la prensa del corazón, creyendo que ella solo es digna de salir en el New York Times.
Para colmo, es fan de Paco Porras, Tamara, Tony Genil y Loly Álvarez.
Biografía
Siempre quiso ser actriz y famosa.
Intentó entrar en la serie Paco y Veva, pero le dijeron que la llamaríancuando muriesen todos los actores del mundo.
Aún así no se rindió y siguió haciendo castings, pero no hubo manera.
Tuvo que conformarse con ser reportera de Emisión imposible, programa presentado por Bermúdez que pretendía ser El nuevo Informal.
Allí se le soltó más la lengua de la cuenta y ahondó en las vidas íntimas de los famosos, algo que hoy en día le jode que le hagan. Ironías del destino.
Como actriz no tuvo relevancia alguna. Solo apariciones episódicas en series de Telecinco como 7 vidas y Al salir de clase' y otras de Antena 3 como Compañeros y Policías, en el corazón de la calle.
Fue en 2004, cuando le llegó su primer papel importante en televisión, el de Clara Osma en El comisario. Dio vida a esta agente durante 48 episodios hasta 2007, Y Mediaset la desfichó cargándosela a tiros.
Entonces en 2006 le tocó la churra a David Bustamante. Su carrera pegó un subidón y fichó por Bambú producciones y se gastó gran parte de lo que ganaba en tetas.
Entre los años 2010 a 2013 fue una de las protagonistas de Gran Reserva y en 2014 llegó Velvet, una serie de marujas y su único éxito hasta ahora.
Quiso volver a probar con TVE. Iba a ser una serie llamada Indicios, pero por lo que se ve, pensaba que era la reina del mambo, se puso chulita y le dijeron que ya la llamarían cuando muriesen todos los actores del mundo.
Esto cabreó tanto a La Bustamanta que abandonó Velvet y se fue a Mediaset, y la cagó bien cagada.
Lo primero que hizo fue Los nuestros 2. Se fue a la mierda la serie y tuvo que volver a Velvet.
Su carrera empezó a tambalearse sobretodo porque tampoco Ola de crímenes funcionó.
Incluso amadrinó el estreno de Todo es mentira y se saldó con un 4% de cuota, una audiencia irrisoria.
Se sentó en el Chester, uno de los pocos programas que funcionaban en Cuatro y tampoco tuvo poca repercusión. La entrevista se saldó con un 6,2% de cuota de pantalla, el peor registro de las últimas 4 temporadas.
A partir de 2018 le toca la churra a Miguel Torres, un futbolista de segunda fila al que sacó un hijo como seguro de vida por si Vasile la manda al paro.
Desde entonces se ha dejado ir y le da mucho a la fabada asturiana que da gusto.
Su última oportunidad será la adaptación de Después del amor, el tercer proyecto con Mediaset.
Si la caga, tendrá que ir al Hormiguero a hacer la gansa como Pilar Rubio.
Parece que la cosa va acabar mal. Cuando se estrenó Si yo fuera rico, película de Telecinco Cinema, siendo una de sus actrices, fue prácticamente ignorada en la promoción. Eso sí, desde su empresa, Mediaset, se encargaron de ensuciar su nombre con acusaciones de infidelidad cuando estaba casada con David Bustamante.
Se muestra ante la prensa con una actitud entre condescendiente y altiva, sonrisas falsas, como si le diera asco la prensa del corazón, creyendo que ella solo es digna de salir en el New York Times.
Para colmo, es fan de Paco Porras, Tamara, Tony Genil y Loly Álvarez.
Biografía
Siempre quiso ser actriz y famosa.
Intentó entrar en la serie Paco y Veva, pero le dijeron que la llamarían
Aún así no se rindió y siguió haciendo castings, pero no hubo manera.
Tuvo que conformarse con ser reportera de Emisión imposible, programa presentado por Bermúdez que pretendía ser El nuevo Informal.
Allí se le soltó más la lengua de la cuenta y ahondó en las vidas íntimas de los famosos, algo que hoy en día le jode que le hagan. Ironías del destino.
Como actriz no tuvo relevancia alguna. Solo apariciones episódicas en series de Telecinco como 7 vidas y Al salir de clase' y otras de Antena 3 como Compañeros y Policías, en el corazón de la calle.
Fue en 2004, cuando le llegó su primer papel importante en televisión, el de Clara Osma en El comisario. Dio vida a esta agente durante 48 episodios hasta 2007, Y Mediaset la desfichó cargándosela a tiros.
Entonces en 2006 le tocó la churra a David Bustamante. Su carrera pegó un subidón y fichó por Bambú producciones y se gastó gran parte de lo que ganaba en tetas.
Entre los años 2010 a 2013 fue una de las protagonistas de Gran Reserva y en 2014 llegó Velvet, una serie de marujas y su único éxito hasta ahora.
Bustamante le Pegó la pixelacion Sexual y su hija Sufrió las consecuencias |
Esto cabreó tanto a La Bustamanta que abandonó Velvet y se fue a Mediaset, y la cagó bien cagada.
Lo primero que hizo fue Los nuestros 2. Se fue a la mierda la serie y tuvo que volver a Velvet.
Su carrera empezó a tambalearse sobretodo porque tampoco Ola de crímenes funcionó.
Incluso amadrinó el estreno de Todo es mentira y se saldó con un 4% de cuota, una audiencia irrisoria.
Se sentó en el Chester, uno de los pocos programas que funcionaban en Cuatro y tampoco tuvo poca repercusión. La entrevista se saldó con un 6,2% de cuota de pantalla, el peor registro de las últimas 4 temporadas.
A partir de 2018 le toca la churra a Miguel Torres, un futbolista de segunda fila al que sacó un hijo como seguro de vida por si Vasile la manda al paro.
Desde entonces se ha dejado ir y le da mucho a la fabada asturiana que da gusto.
Su última oportunidad será la adaptación de Después del amor, el tercer proyecto con Mediaset.
Si la caga, tendrá que ir al Hormiguero a hacer la gansa como Pilar Rubio.
Parece que la cosa va acabar mal. Cuando se estrenó Si yo fuera rico, película de Telecinco Cinema, siendo una de sus actrices, fue prácticamente ignorada en la promoción. Eso sí, desde su empresa, Mediaset, se encargaron de ensuciar su nombre con acusaciones de infidelidad cuando estaba casada con David Bustamante.
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