Marta Botía

La cuestión no es si
Virginia la abandonará
Si no cuando

Marta Botía Alonso e una cantante conocida por ser una de las dos componentes del dúo musical femenino Ella Baila Sola junto a Marilia Andrés. 

Ella era la que cantaba bien y tapaba lo mal que cantaba Marilia.

A aquella la conoció estudiando COU. Formaron  el grupo Ella baila sola en Madrid. Luego acortan el nombre a Ella baila sola.

Tuvieron un éxito rápido y tan rápido fue su ascenso como lo sería su caída. 

El éxito que consiguieron con el primer disco ya nunca lo volverán a repetir. En el segundo disco vino el bajón, y solamente se llegó a escuchar levemente el primer single, mientras que el resto de canciones pasaron desapercibidas. En 2001 se separan por mutuo acuerdo. Ambas estaban bastante seguras que si seguían juntas se iban a matar la una a la otra.

Dejó de cantar un tiempo y se fue a vivir a Nueva York donde se casó con un americano y tuvo un hijo. 

En 2002 editó su primer álbum en solitario, Cumplir lo prometido, que era decente, sobretodo las canciones con colaboración con Antonio Vega y Enrique Bunbury, pero de ventas muy pobres.

Podía haber seguido por ahí con una carrera discreta de cierta calidad, pero en vez de eso decidió en 2009 regresar con Ella baila sola sin Marilia. El grupo se llamaba ahora EBS (Casualmente las siglas de Ella Baila Sola). Esta vez con una llamada Rocío Pavón. Las ventas del primer disco fueron una mezcla entre de risa y de pena. 

Se volvieron a separar porque Rocío, la sustituta de Marilia y expresidenta del club de fans del grupo decidió dejar la formación por problemas con el mánager. Lo anunciaron por Facebook, ya que les daba mucha pereza hacer una multitudinaria rueda de prensa a la que nadie iba a ir. 

El caso es que acabaron a tortas virtuales. En definitiva, un culebrón venezolano en el que al final, ambas acaban culparon al mánager, que probablemente sea el que les consiguió el contrato discográfico. 

Poco después Marta insistía con una nueva acompañante llamada María del Mar García en 2015. Esta relación también acabó y en 2018 se anunciaba la cuarta reencarnación de Ella Baila Sola, en esta ocasión con Marta Botía y Virginia Mos que venia de La Década prodigiosa.

En 2016, lanza su segundo álbum Martamente que fue un flop. Desde entonces solo hace conciertos de esos remember para nostálgicos con EBS (incluso en alguno ha acabado en el trullo) y estira el chicle todo lo que puede.