Caso Rubiales

Ese dulce cu....

El Caso Rubiales o "El Bulo del culo 2", es una campaña de linchamiento contra Luis Rubiales, presidente de la FEF promovida por sus enemigos en la federación, políticos demagogos oportunistas, locas de pelo azul y aliades planchabragas.

Tuvo la genial ocurrencia de besar a la jugadora Jenni Hermoso en la entrega de medallas de la copa del mundo femenina, muy probablemente enzarpado muy alegre de espíritu. Y lo de cogerse los huevos en el palco con Doña Letizia al lado fue la guinda.

Una versión es que, lo único que había hecho fue coger una gominola que se había quedado pegada a la boca, ya que aquella noche Rubiales durmió desnudo en una tienda de oxígeno que según él, le daba poderes sexuales.

Evidentemente era muy goloso el asunto, y saltaron al cuello personas que no conocían de nada a Jenni Hermoso, femilocas subvencionadas y poco tardaron Yolanda Díaz, Irene Montero y Pedro Sánchez en aparecer la tele para hacer populismo y ponerlo como un depravado sexual para arrastrarlo por el fango con tal de arañar unos votos y desviar la atención de los chanchullos del marido de Armengol y otros asuntos, como las negociaciones de Pedro Sánchez con etarras y separatistas golpistas.

Todos continuaron haciendo sus propios juicios, al igual que la sociedad, donde la gente ya le declaraba culpable sin siquiera oir su propia versión o la de Jennifer Hermoso.

Es posible que incluso le hagan un #MeToo y aparezcan más casos. Sobretodo de las disidentes.

El caso es que fueron las feministas las que se empeñaron en joderles el triunfo a las jugadoras y este asunto lo eclipsó.

El fútbol femenino podía haber pegado un boom en España, pero se fue a tomar por culo por culpa de la mafia feminista y sus palmeros.

Mal asunto si esto es más interesante y se habla más que la propia consecución de un título mundial.

Eso no quita que sea un tío turbio y corrupto, pero ante el ultraje, el señalamiento y ante la jauría feminista, Rubiales, nosotros sí te creemos hermano.

Solo esperamos que Rubiales muera matando y se lleve a medio PSOE y entierre para siempre al fútbol femenino

Primer giro

No conozco a Rubiales
Nunca he tenido contacto...
...lo siento, ¡no puedo seguir! 

Parecía que todo había acabado, pero no había hecho más que comenzar. Cuando parecía ya muerto y enterrado por la inquisición feminazi, hubo un giro dramático de los acontecimientos.

En la rueda de prensa en la que todo el mundo esperaba que dimitiese, puso sus huevos sobre la mesa y cargó contra el feminismo y el lenguaje inclusivo.

Empezó la cacería contra él. El estado no podía permitir que un macho alfa se saliera con la suya. Lanzó a la fiscalía contra él, pero poco.

En otro giro de guión, Jenni Hermoso dijo que no fue consentido cuando antes dijo que no tenía importancia. Ahora prácticamente lo acusaba de violador.No se sabe si le habrán ofrecido carguito en la federación, en Igualdad o por presión social. El tiempo dirá.

Mientras tanto, la cosa empezaba a ser un circo, ya que la RFEF anunció que iba a tomar medidas legales contra Jenni Hermoso. Luego salieron un porrón de vídeos que desmentían a Jenni Hermoso. 

Después de que Alvise publicara un video de Jenni Hermoso con sus compañeras en el bus de la selección riéndose del beso, varios medios publicaron el mismo vídeo, sin marca de agua y con más calidad. Es decir, tenían el video y lo ocultaban. Cuando salió a la luz el vídeo recogieron cable y pidieron perdón huyeron hacia delante y llamaron a los que los difundieron machistas de ultraderecha. A Alvise, el ministerio de la verdad español le chapó la cuenta de Twitter.

La FIFA suspendió a Rubiales por el qué dirán.

El Gobierno pidió al TAD lo mismo, pero consideró el beso a Jenni Hermoso sólo como conducta indecorosa y dejó al Gobierno en ridículo.

Después se volvió mucho más esperpéntico cuando la madre de Rubiales se encerró en una iglesia para hacer huelga de hambre.

Otros aseguran que a Rubiales tiene grabaciones contra Pedro Sánchez y otros. Si cae, muchos caerán y todos zurdos.

Pasaban los días y la supuesta víctima seguía sin presentar denuncia, para no perder el juicio tras los vídeos y la Fiscalia sin actuar de oficio para que Rubiales no filtrase sus cositas. Al final, no le quedó más remedio que denunciarlo a la fiscalía y porque la llamaron ellos. Eso sí, no se querella directamente no vaya a ser que pierda y le toque pagar las costas.

En condiciones normales se archivaría según llegaba, pero con un poco de perspectiva de género la fiscalía te lo afina. Ya veremos qué la pasa a La Yenni cuando acabe la investidura y pasen de ella.

Sería gracioso que por querer cargárselo se les reviente a todos el chiringuito.

Al final no le quedó otra que dimitir cuando empezaron a atacar a su familia (su madre y sus hijas).

Recogida de cable

Pero dio otro giro de guión cuando los expertos en lectura de labios ratificaron en la Audiencia Nacional que Rubiales pronunció "un besito" antes de besar a la futbolista.

Justo cuando se habla de que “fuentes judiciales” descartaban que se pueda juzgar a Rubiales por abuso y solo tirarán para adelante con los cargos por coacción, Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez restaron importancia al beso.

Es decir, solo se le juzga por presionarla para que niegue algo que ahora resulta que no es nada.

Un señor vestido de negro en un altar las sacó de su mundo de piruletas. Sabían que no podían andar faroleando como hacían en la prensa.